Con el tema Setting Sail empieza la serie Modern Love, dividida en ocho capítulos que recrean la célebre columna del New York Times, entrelazando historias de amor que se sustentan en la vida real.
Bajo la prerrogativa de que el amor es universal, exploramos sus propiedades camaleónicas y las expectativas que rodean cómo lo vivenciamos. De manera ligera pero importante, las historias representan el amor en aprietos y puesto a prueba en sus formas más vulnerables y expuestas que desafían demonios personales como los estereotipos, los roles tradicionales y el qué dirán.
A cargo de llevar el mensaje universal que todos conocemos y buscamos, y con Nueva York como escenario, los encuentros en la ciudad cosmopolita nos transmiten cómo el amor puede estar a cada vuelta de esquina, basta reconocerlo y arriesgarse.
La serie toca temas delicados y algunos tal vez poco trabajados en la historia fílmica, y logra componer en delicadas fibras el amor en su multiplicidad de formas.
Nuestro lenguaje es universal y sin embargo conlleva un carácter propio que no se replica del mismo modo con otro ser. En la vida el amor nos es dado, pero también debe aprenderse. El desarrollador de una app debe practicarlo, viejos amores que se reencuentran y otros que se conforman hacia el final de la vida, deben reaprenderlo. También el amor propio puede aprenderse. Esta emoción no es siempre la misma, muta, se perfora y se vuelve a coser. A veces tenemos miedo de perder las oportunidades y a veces buscamos una segunda vuelta.
“Sometimes you realize that true love in its absolute form has many purposes in life. It´s not actually just about bringing babies into the world or romance or soul mates or even lifelong companionship. The love we had in our past, unfinished, untested, lost love, seems to easy, so childish to those of us who choose to settle down. But, actually, it´s the purest, most concentrated stuff.”
Al seguir estas historias reales donde las pasiones y las decisiones van de la mano, se nos da lo que estábamos necesitando: una idea a la cual aferrarnos que nos brinde esperanza para transitar por las etapas de la vida sintiéndonos plenos en nuestra propia piel.
Cada actor en esta serie realiza un trabajo fenomenal, representando a personajes verosímiles que percibimos cercanos, de nuestro presente, pasado o futuro.
Sin duda, volveremos a escuchar de esta producción en boca de otros o para su continuación. Personalmente, no puedo esperar a que haya una segunda parte.
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